Un decreto es una decisión, una resolución.Cuando decretas se activan las imágenes y el sentimiento y/o emoción coherentes a esa decisión.
Recordemos que pensamos con imágenes.Y ese es el secreto del decreto, o asunción, o visualización, para hacer realidad nuestros deseos: imagen más emoción y/o sentimiento.
Cuando decretas, en forma simultánea estas sintiendo que lo que has decidido es un hecho.
¿Lo has observado?
Entonces , decreta claramente.
No decretes que TE LLEGARÁ DINERO, O EL DINERO ESTÁ POR VENIR, O LA SALUD VIENE EN CAMINO, O EL MILAGRO ESTA LLEGANDO. De esta forma estas decretando una espera vitalicia.
Estas decidiendo una realidad de algo que está por llegar pero jamas llega. Siempre un minuto antes de su llegada.
Decreta que EL DINERO HA LLEGADO A TU VIDA, QUE LA SALUD YA ES UN HECHO QUE EL MILAGRO HA ACONTECIDO.
Decreta con claridad lo que deseas.
Y recuerda: EL DECRETO NO ES UN PEDIDO, ES UNA DECISIÓN DE EXPERIENCIA.
©Móni Ciampagna
